Tener amigos con derecho puede sonar en principio algo muy atrevido, tal parece que de esta forma damos carta abierta a todo, y si hablamos de si es algo bueno o malo, dependerá de la perspectiva de cada uno de nosotros; de manera que en el artículo de hoy conoceremos ¿hasta donde puede llegar una relación entre amigos con derechos?
Comúnmente toda relación empieza por una amistad, y como bien se sabe una cosa puede llevar a la otra y la otra a la otra, ¿será entonces que una relación entre amigos con derecho puede sobre pasar cualquier límite y llegar incluso a formalizarse? Por lo general una relación así no prospera mucho, pero como en la vida no hay regla que se aplique de manera general, las probabilidades de que esto llegue a asuntos más serios existe.
Para muchas personas las experiencias de este tipo han sido positivas, y pocos se han quejado de tener algo así, y es que en realidad se trata de algo creativo y arriesgado que muchos han podido disfrutar, sin embargo, las posibilidades de llegar a un noviazgo formal se posiciona hasta en un 50%, de manera que al jugar con fuego definitivamente nos podemos quemar.
Incluso hay quienes afirman que si se puede consolidar una relación de pareja aún cuando inician como amigos con derechos, pero en la mitad de los casos la relación no suele ser duradera, al contrario, en muy pocas ocasiones el noviazgo que se da termina por ser exitoso. En caso de querer mantener una relación entre amigos con derechos existe un par de reglas que se deben de respetar, entre las cuales resaltan:
– ”Dejar en claro que no somos novios”
– ”No arruinar la amistad”
– “El sexo debe ser muy bueno”
– ”Están prohibidos los celos”
– “No enamorarse”
¿Y por qué este tipo de relaciones es tan popular? sencillamente porque no hay gran compromiso, por el contrario, hay diversión, placer y libertad, sin duda lo más soñado para muchas personas del género masculino y femenino.
¿Desventajas? confusión emocional, creer que de la amistad pueden fácilmente mezclar sentimientos y enamorarse, y si en grado caso llegan a manifestar sus sentimientos, las posibilidades de perder esa amistad son altas, y pocos están dispuestos a correr el riesgo.
Una aventura de este tipo puede llevarse sin ningún problema cuando ambos son solteros, pero estando dentro de una relación se convierte en un juego bastante peligroso.